Nicaragua cancela concesión del controvertido canal interoceánico

Han transcurrido casi una década desde que Nicaragua inició los trámites para construir un 3️⃣ canal que enlace el Atlántico y el Pacífico, y recientemente ha cancelado la concesión otorgada a un hombre de negocios 3️⃣ chino para completar el proyecto. Criticos señalaron que el canal representaba un peligro para el medio ambiente y desplazaría a 3️⃣ comunidades rurales.

A pesar de una ceremonia simbólica de “ rompimiento de tierra” en 2014, no se llevó a cabo ningún 3️⃣ trabajo en el canal que conectaría las costas atlántica y pacífica de Nicaragua. En un determinado momento, las cuadrillas iniciaron 3️⃣ trabajos de mejoramiento de accesos cercanos al canal, pero la construcción del cauce nunca comenzó.

Miles de granjeros nicaragüenses se manifestaron 3️⃣ en contra de los despojos de tierras destinados a crear una ruta para el proyecto gubernamental.

Protestas y sentencia de presidentes 3️⃣ de comunidades

En 2024, un juez nicaragüense condenó a tres líderes comunales que participaron en las protestas a prisión por 216 3️⃣ años, 210 años y 159 años. Fueron acusados de promover un “golpe de Estado” contra el gobierno. La ley nicaragüense 3️⃣ limita el tiempo de encarcelamiento a 30 años.

Repercusiones y consecuencias del canal

El controversial proyecto del Canal Interoceánico de Nicaragua, una 3️⃣ iniciativa de R$50 mil millones y 278km de longitud, ha tenido consecuencias sociambientales y financieras desde su concepción. Desde una 3️⃣ visión optimista, el canal generaría decenas de miles de empleos y potenciaría la economía. No obstante, detractores argumentan que conlleva 3️⃣ riesgos ambientales, desplazaría a miles de familias del campo y resulta inviable financieramente.

El resentimiento por el plan del canal contribuyó al descontento creciente de la población con el gobierno de Ortega, que 3️⃣ derivó en protestas generalizadas en 2024 y en una represión violenta por parte de las autoridades.

El canal dividiría el Lago 3️⃣ Nicaragua, el más grande de Centroamérica, y forzaría el desplazamiento de aproximadamente 120 000 personas, incluyendo comunidades Rama y Creole 3️⃣ de territorios indígenas protegidos en la costa del Caribe.